Una sanidad pública que es de todos

Como saben, a veces en nuestro Foro Político, les cuento cosas que me ocurren en mi día a día y que de un modo u otro acaban relacionadas con la gestión que se hace del poder ejecutivo. Y en tiempos de crisis, en los que los recortes están a la orden del día, me da la impresión de que se podrían hacer tantas cosas, y ya no con los mismos recursos, si no con menos. Bastaría que nos aplicásemos todos en nuestro día a día un principio de coherencia que hemos perdido en algún momento y que ya no recuperamos nunca. Esta semana he vivido prácticamente en el hospital, bueno en realidad más tiempo, pero particularmente esta semana las cosas han empeorado. Y solo cuando las cosas no pueden ir peor, nos damos cuenta de lo que realmente no funciona.

hospital

Cuando entré en urgencias con mi abuela, las cosas no podían empezar mejor, el médico de turno era realmente encantador, y con ese toque humano que parece nos hemos dejado en el tintero de cualidades en un personal sanitario. En todo caso, luego pasamos por toda una serie de desprecios y faltas de ética profesional dignas de como poco una denuncia. Para poner nombres estoy hablando del Hospital del Barbanza en Galicia. Así, desde auxiliariares de enfermería todas fuera para fumarse un pitillo más de veinte minutos, mientras que yo me volvía loca buscándoles, pasando por enfermeras que no saben lo que le ponen al paciente y que al preguntar te contestan que preguntes al médico al día siguiente. Eso sin tener en cuenta que cuando se acaba la medicación o no hay agua de oxígeno, más vale avisar, si no no es su problema. Altas que no vienen a cuento, porque hay que ahorrar en recursos, y médicos que han pérdido la sensibilidad para hablar de la muerte o que nunca la han tenido. Por si no bastase, puertas de emergencia cerradas por la noche, y escasas informaciones de como acceder al hospital más allá de las 22:30.

Y todo esto, sabiendo que la SS la pagamos todos los que la pagamos, y que la escasez de servicios no disminuye una cuota que nos cuesta abonar mes a mes. Pero claro, que le va a importar eso a un país en el que los médicos lo son por cobrar, al menos en su mayoría, las auxiliares de enfermería van al trabajo porque saben que hay mucho paro en otros sectores, y las enfermeras han perdido la cualidad de humanidad no se sabe cuando. Así es como hemos contruído este pais, y si algo tan fundamental como la sanidad no funciona. Entonces, apga y vámonos