Mientras que desde todos los organismos europeos nos han dicho que nuestro sistema educativo no es lo suficientemente bueno, sobre todo por el hecho de que no hay un rendimiento escolar como en la media, porque no tenemos una inversión suficiente y efectiva por alumno, y porque la educación superior en muchos casos no responde a los intereses del mercado; a nuestro ministro de educación, que hace nada acaba de celebrar su primer aniversario en el cargo, Wert, le parece que ir contra corriente es lo que se lleva y a él solo le preocupa lo que lleva teniendo en mente desde hace unos meses y que ya nos contó a todo suscitando críticas de todos los sectores que llegaron incluso a pedir su dimisión.
Lo que ha ocurrido es que al señor Wert se le ha ocurrido que ya que va a hacer una nueva reforma educativa, que a mi parecer no tiene ni pies ni cabeza, le va a incluir lo que el tiene en mente, porque al fin y al cabo, él es el que manda ¿verdad? Así toca españolizar a los catalanes, y si el gobierno de la Generalitat se pone muy tonto, pues los españoliza también a base de billetes. ¿Cómo? Pues si a CiU se le ocurre negarse le obligará por ley a contratar escuelas privadas que si lo hagan. O sea, que si no educa en la pública en español, habrá que sacar la cartera de todos los catalanes para pagar también la privada y garantizar que todos estudien en español, que para eso es la lengua de España y la que quiere Wert que todos aprendan.
Pero aunque el guiño va para Cataluña, no se crean que no va a españolizar a los gallegos y a los vascos, y no nos quita las lenguas que en su mente deben ser algo diabólico que debería haber muerto hace siglos, como le hubiera gustado a más de un dictador. Así que no importa el fracaso escolar, ni tampoco si no pueden ya pagarse la universidad. Tampoco les importa si hay que pagar por el tupper lo mismo que los diputados por un menú variado y de lujo. Aquí lo que importa es españolizar. Y ya que estamos ¿qué tal una bandera por aula? De seguro que el mismo que ganará lo de cambiar la señales de tráfico se saca un buen dinero por tantas banderas. A ver si al menos la reforma educativa sirve para generar empleo, porque para otra cosa, señor Wert, me temo que no…
