El lehendakari Patxi López ha dejado claro su deseo de que Batasuna sea legalizada y pueda presentarse a las elecciones municipales que se celebran el próximo mes de mayo. No es la primera vez que López apuesta por la legalización de la izquierda abertzale. Para el lehendakari, esto supondría una buena noticia y la demostración de que Batasuna condena la violencia y el terrorismo de ETA.
Sin embargo, aquí el lehendakari se equivoca. El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha dejado claro por activa y por pasiva que lo único que tiene que hacer Batasuna para ser legalizada y poder presentarse a las elecciones es exigir a ETA su fin definitivo o, en el caso de no conseguirlo, desligarse de la banda terrorista. Cuando haga una de esta dos cosas, será legalizada, pero no antes. Y, al menos por ahora, Batasuna no ha dado ninguno de los dos pasos. Es a la izquierda abertzale a la que le toca mover ficha, la pelota está en su tejado, no en el del Gobierno, es Batasuna la que tiene que demostrar su voluntad, no el Gobierno.
Por su parte, el presidente del PNV, Íñigo Urkullu, también ha mostrado su deseo de que Batasuna pueda estar presente en las elecciones del próximo mes de mayo. Según Urkullu, el motivo que tienen para poder presentarse es la voluntad de muchos de los integrantes de la izquierda abertzale de romper con el terrorismo de ETA. Pero al presidente del PNV se le olvida que la voluntad no es suficiente, como tampoco lo son las palabras. Que lo único que tiene que hacer Batasuna es demostrarlo con hechos. Así de fácil. O de difícil. Quién sabe.
Fuente | Público
