Barcelona.- El presidente catalán, José Montilla, ha avisado hoy de que las vías por las que apuestan algunas formaciones políticas «no están dentro del Estado de Derecho, ni del Estatut», y pueden por tanto «traer más lío, confusión, y crispación» dentro de Cataluña y en la relación con España.
Montilla se ha pronunciado en este sentido en una entrevista en Telecinco recogida por Efe al día siguiente de la celebración de la Fiesta de la Rosa del PSC en Gavà, una cita a la que acudió, tras dos años de ausencia, el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien presentó al PSOE y al PSC como los pilares de la convivencia entre España y Cataluña.
El candidato del PSC a las autonómicas de noviembre ha cargado contra CiU por hacer una propuesta «confusa y difusa» y plantear que el dilema en Cataluña es «independencia o decadencia».
«Yo creo que ese no es el dilema, el dilema es si Cataluña continúa avanzando con políticas sociales progresistas y si lo hace también con la cooperación del resto de pueblos de España», ha aseverado Montilla, para precisar que «hay formaciones que no quieren esto, sino que apuestan por otras vías que no están dentro del Estado de Derecho, ni del Estatut, y que pueden traer más lío, confusión, y crispación, en Cataluña y en la relación con España».
Montilla no ha precisado cuáles son estas formaciones, pero sus declaraciones se producen en un momento en que CiU apuesta por el concierto económico, y partidos independentistas como ERC defienden la celebración de un referéndum de independencia.
Por otra parte, y preguntado por un eventual desembarco de la ministra de Defensa, Carme Chacón, en la política catalana, Montilla ha señalado que Chacón «tiene un gran papel en el Gobierno como titular de Defensa».
Montilla ha defendido una vez más al ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, como un «activo» para el PSC «sin ningún género de duda», y ha explicado que su vuelta a la política catalana es una decisión «política y personal» del que fuera alcalde de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona) que él respalda completamente.
El presidente catalán no ha querido aclarar si seguirá al frente del PSC si los socialistas pierden la Generalitat tras el 28-N, una cuestión que ha zanjado diciendo que ahora «no tengo la cabeza puesta en eso, no hago planes en otros supuestos, ahora pienso en revalidar un buen resultado».
El socialista se ha mostrado optimista en este sentido: «Tenemos que ganar las elecciones y lo haremos, las encuestas se equivocan y las urnas todavía están vacías».