Al igual que ya hiciera el Ministerio de Cultura, ahora el que se ha enfadado y se ha cogido una pataleta y una rabieta de lo más infantil es el Ministerio de Sanidad, que también se ha picado, pero en este caso no con Álex de la Iglesia, sino con una asociación de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales.
Se trata de la Asociación Colega de Valencia, que ha denunciado que ha sido excluida de las subvenciones del Plan Nacional contra el Sida por haber supuestamente insultado en unas manifestaciones a las dos últimas ministras de Sanidad, Trinidad Jiménez y Leire Pajín. El presidente de la Asociación afirma que el Ministerio les ha enviado un comunicado en el que les informa del motivo del fin de esta subvención y en el que también se les informa de que, si quieren volver a recibirla, tienen que pedir disculpas.
Mientras desde la Asociación Colega aseguran que las manifestaciones que hicieron frente al Ministerio de Sanidad fueron pacíficas,desde el Ministerio afirman que hubo insultos y amenazas. Como suele ocurrir siempre en un enfrentamiento, las posturas de cada una de las partes implicadas son totalmente opuestas.
No sabemos qué ocurrió exactamente, pero lo que sí sabemos es que parece que últimamente está prohibido criticar al Gobierno. Y si no, que se lo pregunten a Álex de la Iglesia o a los integrantes de la Asociación Colega. En cuanto se les dice algo que no quieren oír, los Ministerios se agarran un berrinche. Más infantil imposible. ¿Dónde queda la libertad de los ciudadanos, la libertad de expresión, de poder decir lo que pensamos, de poder opinar y de poder protestar cuando algo no nos gusta?
Fuente | El Mundo
