Marruecos da bandera verde al boicot comercial a pesar de la intervención del rey Juan Carlos

Y Marruecos continúa. Cómo ya habían avisado, el boicot comercial ha comenzado. Desde ayer el país vecino apenas se pasan hortalizas a través de la frontera melillense, y el transporte de pescado se ha paralizado por completo. Pero las acciones no se paran aquí, el lunes comienza un boicot durante 15 días a materiales de construcción, y el martes uno durante 48 horas que afectará a las mujeres que trabajan como domésticas en Melilla.

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Y todo esto ocurre cuando ya España ha hecho su parte. Esa parte diplomática por la que se estaba llamando a gritos. Pues bien, si ya ha intervenido el rey, que en esto de la diplomacia suele ser mejor que la mayoría de los presidentes de uno y de otro bando, ¿por qué se sigue dando bombo a la cuestión?. Sencillo. Desde el principio había otros intereses. Que la diplomacia española no funcionaba era sólo una excusa dada por Marruecos para seguir atacando a España.

Pretensiones marroquíes

Lo mejor del asunto es que entre boicots, las asociaciones marroquíes (que ayer hicieron lo que quisieron en la frontera, bajo la mirada desinteresada de la policía marroquí) siguen apelando a una «Melilla ocupada». Además, y por si fuera poco, resulta que no sólo han aparecido denuncias por parte del lado de la frontera africano, si no que ahora son los policías españoles los que se quejan ante la actitud de los marroquíes cuando la autoridad policial es una mujer. Pues estamos apañados. Si ellos son quienes envían los comunicados, quiénes no responden ante los gestos diplomáticos que enviamos, quienes tampoco mantienen la diplomacia con nuestro país (llevan más de 8 meses sin embajador en España) y quienes no aceptan nuestras costumbres en nuestro propio terreno, ¿a dónde vamos a llegar?. Que digan directamente lo que quieren. Porque lo que está claro es que algo andan buscando. Y ya para dejarlo claro y no andar con tonterías, Ceuta y Melilla son territorios españoles. Y sobre ese tema no hay nada que aclarar.