La seguridad de la visita del Papa, por los suelos

 SaradaFamilia

Después de las molestias que están causando a los vecinos de Barcelona, especialmente a los que viven en los alrededores de la Sagrada Familia, para establecer fuertes medidas de seguridad en la visita que el Papa Benedicto XVI va a realizar este fin de semana a la Ciudad Condal, ese plan de seguridad ha quedado ahora por los suelos.

Un ciudadano se ha encontrado en plena calle 11 hojas que supuestamente contienen  información confidencial sobre el dispositivo policial. El propio delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, ha reconocido después de este sorprendente hallazgo que hace un mes uno de los miembros del dispositivo de seguridad perdió la documentación. Sin embargo, ha asegurado que después de ese fallo se realizaron varios cambios, por lo que ahora no existe ningún tipo de riesgo ni de peligro.

En la documentación aparecen nombres, números de teléfono, direcciones de correo electrónico y las hojas llevan impreso el sello del Ministerio del Interior. Por si fuera poco, las hojas encontradas en la calle incluyen también datos sobre el número de cámaras de seguridad que se van a instalar en los alrededores de la Sagrada Familia y el nombre de los hoteles en los que se van a alojar todas las personas que acompañan a Ratzinger.

Aunque no exista ningún riesgo para la seguridad del Papa, como se insiste desde la delegación del Gobierno en Cataluña y desde la Policía Nacional, las personas que forman este dispositivo han quedado en ridículo ante la opinión pública. No pueden pretender volver locos a los vecinos con cortes de tráfico, registros en las viviendas e incluso impidiéndoles la entrada en sus propias casas cortando calles a los peatones y luego no hacer bien su trabajo.

Es cierto que ha sido un descuido, un pequeño fallo y que nadie es perfecto, todo lo contrario, somos humanos y a todos nos puede pasar, pero hay puestos de trabajo que conllevan muchísima más responsabilidad que otros. Me gustaría saber qué opinan de todo esto primero la persona que se encontró los papeles en la calle y segundo, todos los ciudadanos que, les guste o no, quieran o no, se han visto afectados por la visita del Papa a nuestro país. Si tanto preocupa la seguridad de Ratzinger y el dispositivo para evitar incidentes, deberían esforzarse no sólo en los vecinos, sino en los propios integrantes del plan de seguridad.

Fuente | El País