Fui la primera en sentirme orgullosa cuando los españoles salimos a la calle. Cuando fuimos capaces de seguir lo que nuestros vecinos árabes iniciaron. Cuando tomamos con toda nuestra fuerza nuestra libertad y nuestras ganas de salir adelante para plantarnos al gobierno y decirle que así no se hacen las cosas. Sin embargo, a día de hoy, no puedo más que seguir indignada con el gobierno, pero aún más lo estoy con los Indignados, con los que hicieron que miles de personas se manifestasen, que saliesen a las calles, pero a día de hoy solo proponen un programa peor que el de los políticos.
Por ello, a modo de reflexión y a modo sobre todo de crítica constuctiva para poder hacer que ese movimiento de los Indignados sirva para algo más que para acampar en la plaza del Sol,hoy escribo este post, al que he llamado 8 razones por las que estoy indignada con los Indignados
1.- Los inicios fueron buenos, pero luego todo quedo en una obra de buena fé sin objetivos más allá de votar en blanco.
2.- Las propuestas iniciales buscaban llamar la atención de toda la población en general que estaba cansada de dos partidos que se alternan en el poder buscando beneficio propio. Las de ahora parten más de un colectivo antisistema que representa a una minoría, y cuyo cambio no solucionará los problemas presentes, sino que creará unos nuevos.
3.- Pasamos de objetivos racionales como sueldos equiparados de los políticos, eliminación de los privilegios que tienen, a cosas que atacan directamente a la propiedad privada y al derecho ciudadano, como que un inquilino pase a tener la propiedad de una vivienda tras 10 años de alquiler. ¿Por qué no se mete en una hipoteca? Aquí el que no arriesga no gana
4.- La atención de los medios se logró mediante la presión de manifestaciones serias, que pasaron a día de hoy a convertirse en estupideces varias como talleres de arte y abrazos gratis
5.- Plantarse en la plaza de El Sol para parar al poder político no significa acampar sin más. Hay que hacer cosas, movilizar a la población, no ponernos a cantar y a bailar como si de una fiesta vulgar se tratase.
6.- No hay un programa que haga ver lo que se está buscando a los más excépticos. Sabemos lo que queremos, pero cuales son las propuestas reales, que es lo que de verdad busca en movimiento Indignados. Un manifiesto por puntos ayudaría aclarar muchas dudas.
7.-Negociar con el gobierno es una opción, pero es una opción cuyo primer objetivo es liberar a los que han sido encarcelados por buscar los principios de la libertad.
8.- Si queremos un futuro mejor empecemos por definir estrategias. De nada vale decir que estamos indignados y plantarnos en la PLaza si no exigimos al gobierno que cambie las cosas. El gobierno es una institución necesaria, y somos nosotros los que le tenemos que explicar que es lo que tienen que hacer.
