Recortes que para algunos no tienen sentido

Ideológicamente hablando, no soy para nada de derechas. Pero como los que me leen a diario saben, he votado por el PP el pasado 20 de noviembre. En realidad, creo que en España nos hemos metido en un buen tinglado de izquierdas y de derechas, que ya ni siquiera nosotros sabemos que significa ser de unos y de otros. Si ser de izquierdas significa ser progresista, entonces soy de izquierdas. Y si ser de derechas significa ser conservador, entonces, no soy de derechas. Pero lo que ya no me queda tan claro, entre derecha e izquierda, es porque la izquierda tiene que utilizar a raudales el dinero público cuando ese, lo pagamos todos.

Aquí el problema es que vemos buena a la izquierda porque le da algo a todos. Pero algo, lo tomó de alguien, y por lo general ese alguien son también los que lo recibieron. Y si dar algo a todos, significa meter a veinte intermediarios, que como hasta ahora se ha demostrados eran enchufados que querían seguir chupando del bote, entonces muy señores míos, dimito formalmente d ela postura ideológica izquierdista.

Y es que precisamente hay que hablar de posturas ideológicas. Porque de la gestión, bien se podrían poner todos de acuerdo. Es una tarea muy sencilla: cobrar lo menos posible a los ciudadanos para no ahogarles con impuestos, para luego repartir la riqueza que queda entre los que de verdad más lo necesitan (comprobando cada caso) y con los menores intermediarios posibles. Luego de tener el concepto de gestión claro, ya podemos hablar de entender nuevos modos de vida o no, de defender a la familia tradicional, o abrirse a la modernidad; de aceptar modelos linguísticos diferentes, de querer o no los toros como patrimonio histórico y de esperar o no en que la tecnología esté al alcance de todos.

Pero es que si lo que me vende la izquierda son que no se recorta en tiempo de crisis, para endeudarnos todavía más, entonces me venden humo. Que se recorte, lo que no se ha recortado antes, los vicios que llevamos años manteniendo para poner a funcionar esto. Eso sí, cuando funcione, me espero sin duda que lo que sobra nos lo devuelvan y no se pierda por alguna que otra caja, que si no son fundaciones, son primos.