Las crónicas de Egipto desde que hemos empezado a transmitir no han cambiado demasiado en la forma. Es más, los dos frentes continúan; por una parte una mayoría de población que quiere que el presidente se vaya, y por otro, un Mubarak que se resiste a abandonar el poder. Y las protestas continúan, y la situación del país va a la deriva, generando dos bandos enfrentados por la muerte: los defensores de Mubarak, y sus detractores.
Bajo mi punto de vista, esto no se acabará. No se acabará porque la lucha interna de Egipto ya no tiene otra salida más allá que la salida de Mubarak, y mientras el se resista, las manifestaciones continúan.
FUENTE | Vídeos EFE
