La verdad es que hoy había un evento importante. El PP y el PSOE parecían dispuestos a sentarse entorno a una tabla a negociar. A negociar por primera vez desde que Rajoy llegó a la Moncloa, en principio por el bien de los españoles. Y aunque he de dir que el fin que los puso sobre esa tabla es muy noble, no hay que obviar que ambos grandes partidos ya han mostrado sus cartas acerca del tema de los deshaucios anteriormente, y parecían ser distintas a las intenciones conciliadoras de hoy en día.
El acuerdo, al menos este lunes no se ha logrado, aunque mañana se volverán a reunir y esperan poder cerrarlo para presentarlo el jueves y que las medidas se activen con la mayor brevedad. Sin embargo, aunque puede que nos parezca que frenar los desahucios por los dos grandes partidos es algo importante, sobre todo con los casos que se han dado en los últimos días de suicidios y por el elevado número de embargos desde que ha comenzado la crisis, la verdad es que unos y otros han vetado decenas de iniciativas orientadas en dicho sentido.
Vamos que tanto pP como PSOE se han sentado a esperar que dos personas se hayan quitado la vida para poder pensar que esto es un problema. Y sin intentar ser frívola, yo me pregunto si de verdad unos y otros están tan en las nubes para no darse cuenta de cómo pueden sentirse los españoles sin trabajo, sin casa, con una sanidad que hay que pagar, con una justicia apta solo para ricos y una reforma laboral que solo genera despidos. ¿Tiene que haber más muertos para que de verdad piensen que no podemos soportar más recortes?
