David Cameron, que asumió el cargo de primer ministro en mayo, dijo que el nacimiento les había pillado «un poco por sorpresa», ya que no lo esperaban hasta septiembre, pero añadió que todo había ido muy bien.
«Estamos absolutamente emocionados. Es una niña increíblemente preciosa y soy un padre muy orgulloso», dijo a canales de televisión británicos a las puertas del hospital en la localidad de Truro, en la pintoresca región de Cornwall, donde la familia estaba pasando las vacaciones.
El último primer ministro británico que tuvo descendencia mientras ejercía el cargo fue el laborista Tony Blair, cuya esposa Cherie dio a luz a su cuarto hijo, Leo, en mayo de 2000. Leo Blair fue el primer bebé de un primer ministro en actividad en 150 años.
Cameron, que a los 43 años es el líder de los conservadores de centroderecha, encabeza la coalición de Gobierno desde las elecciones de mayo. Samantha Cameron, de 39, anunció poco después de los comicios que renunciaría a su trabajo como directora creativa de la tienda de artículos de lujo Smythson.
La pareja tiene otros dos hijos, Nancy y Arthur, nacidos en 2004 y 2006, respectivamente. Su hijo mayor, Ivan, murió en febrero pasado a los seis años. El niño sufría una parálisis cerebral y una epilepsia severa.
