El Gobierno catalán ha desistido de nuevo en su intento de crear una gran red pública de telecomunicaciones que una 5.843 sedes de la Administración catalana en todo el territorio. Según fuentes cercanas a este proyecto, los partidos que integran el Ejecutivo (PSC, ERC e ICV) han acordado frenar el proyecto, que requería una inversión de 662 millones de euros.