La campaña electoral se pasa, como era de esperar a las redes sociales. Las páginas de Facebook de los partidos, los perfiles personales de Twitter y Facebook y los contenidos de YouTube están colapsando la red a modo de información por doquier.
Pero esto no es nada nuevo. No es nada que nos sorprenda, como ya sucedió en las elecciones catalanas, las cuales ya seguimos desde Foro Político, y como habían marcado las bases de la campaña presidencial de Obama, parece que el futuro político tienen un gran punto de interés en social media, en los que encuentra un modo de comunicarse con el público, mucho más personalmente y en el que el marketing político desarrolla una gran labor para conseguir nuevos votantes.