La verdad es que de la crisis estamos ya un tanto cansados de hablar. Y tras la confirmación del ministro de economía de que España entrará en recesión, nos quedan muy pocas salidas, la verdad. Sin embargo, a la recesión propia del mercado y al trabajo como problema fundamental de este país, hay que sumar ahora que la inversión pública se va a reducir al mínimo; es más, creo que al recién llegado ministro de Fomento, va a ser uno de los años que menos obras le encarguen.
Y es que ya 2011 se ha cerrado con un presupuesto bajo mínimos, ya que hablamos de un importe de 2.331 millones de euros, un 56% menos que en el mismo periodo de 2010, lo que supone una de las cifras más bajas en cuanto a inversión en Fomento de la última década. Y para los que quieran saber cuales han sido los sectores en los que se ha invertido he de decirles que AENA Y Puertos junto con ADIF son los que encabezan la lista.
De todas formas, aunque para 2012 todavía no tenemos claro en donde y cuanto dinero se va a invertir, de seguro que viendo lo poco que se ha gastado en 2011, y como Fomento cierra el año con la menor inversión de la última década las cifras no se van a mejorar, por lo que si hay carreteras en mal estado por donde viven, van a tener que pensar que por un rato se van a quedar así. Es lo que tiene la crisis.
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