Elecciones venezolanas: crónica de unas elecciones injustas

¿Cómo es posible que un partido saque casi la misma cantidad de votos y obtenga 37 diputados más? ¿Es acaso eso símbolo de una democracia?¿Símbolo de un gobierno que pone a todos en las mismas condiciones para presentarse a las elecciones?.

Así están las cosas en Venezuela. Una diferencia de apenas 100.000 votos difieren los chavistas de la oposición. 100.000 votos más para el partido de Chávez, el PSUV que a cambio de una ley electroal programada y pensada para ganar, le dan una ventaja de nada más y nada menos de 37 escaños con respecto a la oposición.

La prensa internacional, escandalizada con semejante trampa «a la democrática» hizo preguntas sobre el sistema, encarceló a Chávez con interrogaciones que le atacaban directamente, y este, fiel a su estilo no supo hacer otra cosa que arremeter contra la prensa en general.

Aunque la trampa se haya descubierto, y la oposición no obtuviera la representación justa, lo cierto es que Chávez con menos de los dos tercios de la asamblea necesarios para legislar a su antojo lo tendrá crudo para seguir aplicando reformas que convierten a venezuela en un paraíso comunista.

Yo desde aquí, me alegro. Me alegro de que los venezolanos hayan salido a la calle. Me alegro de que le hayan dicho a chávez que están cansados. Y me alegro de que el país haya despertado. Porque Venezuela, se merece algo mejor.