Parece que la reforma laboral, las pensiones y todas las medidas de austeridad tomadas por Zapatero y tan criticadas por la ciudadanía y por otros partidos políticos han tenido ya sus primeros resultados. Primeros resultados que se plasman en el informe del Fondo Monetario Internacional.
Pero no se crean que las cosas van viento en popa. No, ni mucho menos. Lo único que ha cambiado es que el FMI augura para España una caída del PIB de este año de un 0.3%, una décima menos de lo esperado. Y para el próximo año, el crecimiento será del 0.7%, una décima más de lo previsto.
Las medidas tomadas han dado una mayor confianza por parte de los organismos internacionales en la economía española. Así, mientras no se alcance el 2% de crecimiento no se auguran grandes espectativas de empleo para España, y mientras hace unos meses, dicha cifra no podría ser alcanzada en España hasta 2016, las medidas tomadas por el gobierno han hecho cambiar las previsiones internacionales y anticipan la mejoría latente de la economía española, cuyos resultados comenzarán a verse en 2013.
Sí, 2013, está más cerca de 2016. En eso estamos de acuerdo. Pero 2013 está todavía lejos de 2010. Son más de dos años que serán duros, muy duros para todos los españoles. A la falta de empleo, y a la precariedad laboral se unirán ahora las reducciones de ayudas, subvenciones y otras fuentes estatales, por lo que a muchos la cuesta arriba se les hará larga, muy larga. Pero es lo que queda…
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