Ayer fue un día grande para los de CiU. Tras toda la campaña electoral, tras toda la propaganda política, tras un doblete de intentos fallidos, ayer CiU, con Artur más a la cabeza se proclamó vencedor de las elecciones catalanas.
Y además los 62 escaños obtenidos en el Parlamento Catalán, en estas históricas elecciones al Parlamento del 28 de noviembre, le hacen tener una amplia representación como para poder gobernar en solitario. No necesita de apoyos permanentes que le hagan reducir sus políticas, que hipotequen sus ideologías o que hagan que no se puedan llevar a cabo reformas previstas.
La victoria de CiU marca sin duda un antes y un después para Cataluña. Marca también una tendencia a nivel nacional e internacional. Una tendencia de entre derechas e izquierdas. Ya que mirando los datos, y haciendo las cuentas, vemos como por lo general, y salvo contadas elecciones, fue precisamente la derecha la que ha salido ganadora de estas elecciones. Y es que cuando hay un período de crisis, la derecha ha demostrado que en general es capaz de sacar al país de forma más rápida del agujero negro.
Tras tantos intentos y varios fracasos a pesar de ser el partido más votado, CiU no había podido llegar a tomar el poder del parlamento, pero hoy, pueden estar contentos en las filas de Artur Más, porque hoy empieza una nueva era. La era de una Cataluña sin tripartito, la era de una Cataluña gobernada por un partido regional, la idea de una Cataluña de derechas. Son muchos los cambios, y son pocas las certezas de como le irán las cosas a Más como presidente de la Generalitat, pero tenemos todo un período para ver si en realidad, CiU era realmente lo que Cataluña necesitaba.
Foto | Antonio Moreno
