Hace nada os contábamos que Berlusconi se había ido a Lampedusa a prometer tanto a los ciudadanos de la pequeña isla, como a todos los tunecinos que llegaron a sus costas, un permiso temporal que por un año, les daría acceso al espacio Schengen. Pues bien. Eso lo dijo Berlusconi, y en su moemnto hablamos de loq ue supondría para España. Peor ahora parece que ni Francia ni Alemania están por la labor de firmar tal acuerdo. Y sinceramente, visto desde un punto de vista nacional, es lo justo. Desde un punto de vista europeo, ya no tanto.
Pero es que piénsenlo de este modo. ¿A dónde irán los tunecidos llegados a Lampedusa si les abren el espacio Schengen? ¿A una Italia que no se encuentra en sus mejores momentos? ¿A una España en una de sus peores crisis? ¿A un Portugal en pleno proceso de rescate? No, evidentemente eligirán a Francia y a Alemania. Y eso además, teniendo en cuenta que muchos hablan francés, por lo que la lengua facilita las cosas con el territorio galo. Y claro, con lso grancdes de la UE dando apenas muestras de pequeñas recuperaciones, asumir el coste de todos estos inmigrantes no será fácil. Ahora eso sí, aquí aparece la pregunta de siempre. Hablamos de una verdadera Europa? ¿O solo de una teoría.?
