Las peleas entre gobierno y oposición ya no llaman la atención a nadie. Sin embargo, lo que si me llama la atención es el respeto institucional que Zapatero se ha atrevido a pedir a Rajoy. Evidentemente, las formas del PP una vez más no han sido las adecuadas, demostrando mi teoría de que cuando Rajoy está callado suma votos. Sin embargo lo de Zapatero, es poco justificable. Con unas municipales perdidas por cifras absolutas, un pueblo que le pide a gritos dimisión y toda una suma de consecuencias que han llevado a España a una depresión económica poco antes recordada, lo de pedir respeto constitucional, me parece que es del todo menos adecuado.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, exigió hoy «respeto institucional a los tiempos y las formas» al líder de la oposición, Mariano Rajoy, le recordó que mantiene «todas las facultades constitucionales» y recalcó que sólo estará en funciones cuando se convoquen elecciones. En la sesión de control al Gobierno, Zapatero respondió con dureza cuando el líder de la oposición le acusó de dirigir «un Gobierno provisional y desacreditado en el que nadie confía» y de ser un «presidente en funciones». El jefe del Ejecutivo aconsejó a Rajoy que «no se agarre siempre a las peores previsiones» y le pidió que «aporte confianza» porque el actual contexto exige «responsabilidad y un poco de la colaboración de todos», algo que «sin duda» agradecerá la economía española, dijo. Ratificó que ha habido crecimiento económico tanto en el primer como en el segundo trimestre del año y previó que lo habrá en los dos restantes, lo que «consolida la recuperación económica y abre las puertas para una creación de empleo nítido», a pesar de que los españoles sufren todavía las consecuencias de la actual situación.
