Zapatero estudiará con tranquilidad la propuesta de reforma de la ley del Constitucional

Madrid.- El presidente del Gobierno y líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha comprometido hoy ante sus compañeros de partido a estudiar «con tranquilidad» la propuesta de reforma de la ley del Tribunal Constitucional (TC) que impulsa el tripartito catalán.

Así se lo ha trasladado Zapatero al representante del PSC en la Ejecutiva Federal del PSOE, Miquel Iceta, según han explicado diversos dirigentes socialistas consultados por Efe, presentes en la reunión de la dirección del partido celebrada hoy en Madrid.

Iceta ha tomado la palabra para dar cuenta de la resolución aprobada el pasado jueves por el Parlamento catalán y las iniciativas acordadas por la Generalitat el martes 27 de abril.

La idea de la Generalitat es solicitar la convocatoria de la Comisión General de las Comunidades Autónomas del Senado para debatir las propuestas de candidaturas a magistrados del TC, a fin de proceder a su renovación y desbloquear la sentencia del Estatut.

Además, el Gobierno catalán quiere que los senadores del grupo de la Entesa Catalana de Progrès -a ser posible junto con CiU- presenten una proposición de ley de reforma de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional.

En este sentido, Miquel Iceta ha reclamado el apoyo del PSOE en el Senado para admitir a trámite esa propuesta, una vez que se materialice.

Zapatero le ha respondido que, cuando llegue la iniciativa, los socialistas la estudiarán «con tranquilidad», partiendo de que, aunque es necesaria la renovación del TC, ésta sólo puede hacerse si el PP quiere colaborar, puesto que se requiere el respaldo de las tres quintas partes de ambas cámaras legislativas.

Ha dejado claro nuevamente el presidente, según las mismas fuentes, que el catalán es su Estatuto, habida cuenta de que el PSOE lo promovió, debatió y aprobó, convencido de su «plena constitucional».

Algunos de los asistentes a la Ejecutiva Federal han expresado su preocupación ante la posibilidad de que con el nuevo ponente encargado por el TC, de cariz conservador, suponga «un giro de 180 grados» en la doctrina que, hasta ahora, ha defendido el Alto Tribunal sobre el Estado de las Autonomías.

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