Sobre el acuerdo entre el Gobierno y el PNV: 30 monedas de plata

Cuando Judas Iscariote visito a los sacerdotes para ver cuanto recibiría a cambio de traicionar a Jesús de Nazaret, estos le ofrecieron 30 piezas de plata, concretamente siclos de plata, la unidad del sistema monetario hebreo. Parece ser que, con semejante cantidad los sacerdotes pretendían dejar patente el desprecio que sentían por Jesús, puesto que tan exigua cantidad apenas daba para comprar un esclavo o una minúscula parcela de tierra.

El reciente acuerdo entre Gobierno socialista y el Partido Nacionalista Vasco sobre los presupuestos Generales del Estado para el año 2011, supone la última maniobra de supervivencia política de un líder acabado y sin escrúpulos, que no duda en sacrificar a sus propios compañeros de partido en aras de sus exclusivos intereses personales.

José Luís Rodríguez Zapatero ha cedido gustoso a todas y cada una de las exigencias del PNV, que ha sabido sacar buen provecho de la debilidad del Presidente del Ejecutivo. Este acuerdo supone una vergonzosa claudicación en la defensa de los intereses del estado y además va directamente en contra del propio PSOE, al poner en evidencia sus contradicciones internas.

Sin duda Zapatero va a pagar un alto precio al PNV a cambio de su apoyo. Quizás lo más importante, a falta de saber los compromisos ocultos a que se hubiera podido llegar para facilitar el regreso de ETA a las instituciones, sea que este acuerdo, negociado y firmado a espaldas del PSE y Patxi López, supone la sentencia de muerte política del Lendakari vasco, además de frustrar el cambio político en Euskadi.

Por su parte, con las treinta monedas de plata recibidas, José Luís Rodríguez Zapatero podrá comprar un año y medio más de permanencia en la Moncloa ¿Acabará Zapatero, como judas, arrepintiéndose desesperado tras darse cuenta de la magnitud y las consecuencias de su traición?