Siria continúa con sus protestas

Manifestación contra el régimen sirio en la ciudad de Camishli

Parece que al pueblo sirio no hay quien lo pare. No importan los tanques. No importan los disparos. No importan que caigan los inocentes si al final se consigue la causa común. Una valentía digna de admirar por tantos otros pueblos del mundo, que sin embargo, tiene consecuencias en número de víctimas y que por ahora ha dado escasos resultados políticos, a no ser las escasas pequeñas reformas.

Sin embargo, Egipto marcó un nuevo modo de protestar. En los que la preseverancia y el volver a la carga han sido las fórmulas del éxito democrático. Un éxito democrático que también el pueblo sirio se merece.