Madrid.- La portavoz del grupo parlamentario del PP en el Congreso de los Diputados, Soraya Saenz de Santamaría, ha asegurado hoy que la intervención del Rey, con una llamada a su homólogo de Marruecos, evidencia la importancia de lo ocurrido en Melilla, a pesar de lo que diga el Gobierno.
En declaraciones a la COPE, recogidas por EFE, se ha referido las críticas cruzadas entre miembros del Gobierno y del PSOE con el PP a propósito de los incidentes en Melilla y a las relaciones entre España y Marruecos.
Saenz de Santamaría ha indicado que, a pesar de que el Ejecutivo ha quitado importancia a los hechos, hay algo que evidencia «la transcendencia del asunto» que ha sido la intervención del Rey.
A su juicio, ello pone de manifiesto la estrategia del PSOE: «negar la evidencia, decir que no pasa absolutamente nada y moverse siempre en el equívoco», lo que en lugar de solucionar los problemas «lo que consigue es que se enreden más».
Tras preguntarse donde han estado los miembros del Gobierno, la portavoz del PP ha pedido que éste dedique «tan solo una décima parte» de sus energías en vez de a criticar a este partido a solucionar los problemas de los españoles, porque de esa manera «el país iría de otra manera».
En su opinión, ha habido un problema «grave» en Melilla y el PP lo que ha hecho es estar con los melillenses, «arropar a la Policía y a la Guardia Civil y defender a las mujeres», mientras que el Gobierno «lo único que ha hecho» es acusar al PP.
«Hemos estado donde teníamos que estar -ha continuado-, el que no ha estado ni en su sitio, ni donde tenía que estar, ni tratando de poner remedio a esta situación es el Gobierno».
La portavoz del PP ha añadido que éste confunde las relaciones diplomáticas fluidas con Marruecos con «privarse de la firmeza y de la decisión necesaria en este asunto».
Tras reconocer que las relaciones con ese país deben de ser buenas porque son prioritarias, ha señalado que las relaciones internacionales de España deben de estar guiadas por la defensa de los intereses de los españoles.
En su opinión, el Ejecutivo prefiere dejar atrás esa defensa «para no buscar irritación», cuando lo que hay que hacer es «ir con franqueza y decirles a las autoridades marroquíes que no son admisibles los bloqueos» en las fronteras y defender a las policías españolas de actos vejatorios.
Ha anunciado que el lunes, en la Diputación Permanente, en la que el PP ha pedido las comparecencias de los ministros de Interior y de Exteriores, no van a ser «tolerantes con esta desidia» y «los que no hayan hecho lo que tenían que hacer tendrán que asumir su responsabilidad».
En cuanto a la presencia del ex presidente del Gobierno José María Aznar en Melilla, Saenz de Santamaría ha precisado que «si tanto ha molestado» al Gobierno es porque «les deja en evidencia», al no haber ido allí nadie del Ejecutivo.