Barcelona.- El presidente catalán, José Montilla, ha iniciado esta mañana con el presidente de CiU, Artur Mas, una ronda de contactos con los líderes de los partidos catalanes cuya finalidad es preparar la respuesta institucional a la sentencia del Tribunal Constitucional.
Montilla y Mas, que han posado para los fotógrafos antes de reunirse en el despacho del presidente en el Parlamento catalán, analizan desde las 12.20 horas las consecuencias del fallo dado a conocer el lunes y la articulación de una respuesta unitaria a esa resolución.
Antes de esta reunión, la primera entre el presidente catalán y el jefe de la oposición tras divulgarse el fallo, Montilla se ha reunido durante unos 25 minutos con Ernest Benach en el despacho del propio presidente del Parlament con el mismo motivo.
Aprovechando que hoy hay sesión plenaria en el Parlament, el presidente se reunirá a lo largo de todo el día con representantes de todos los partidos para reforzar la unidad catalana ante el fallo sobre el Estatut, que retoca o anula partes de su contenido.
Según fuentes del gobierno catalán, el presidente también quiere sondear la disposición del resto de líderes catalanes a una cumbre catalana, que se podría celebrar mañana por la tarde en el Palau de la Generalitat.
Montilla quiere conocer si los partidos catalanes están dispuestos a reunirse de inmediato, aunque no se conozcan los detalles de la sentencia, o bien si es preferible esperar a conocer toda la argumentación jurídica sobre el Estatut.
Otro interrogante que se deberá resolver tras la ronda de contactos de hoy es si deben participar en la cumbre todos los partidos o sólo aquellos que apoyan el Estatut, lo que dejaría fuera al PPC y Ciudadanos, que dan la polémica del Estatut por cerrada y exigen que se acate la sentencia.
Aunque cada partido difiere en el análisis del fallo sobre el Estatut, los líderes de PSC, ERC, ICV-EUiA y CiU son conscientes de que en estos momentos hay que estar a la altura de las circunstancias y que se debe visualizar un frente común contra el fallo del TC.
Prueba de ello es que no ha habido discrepancias a la hora de anunciar una manifestación unitaria para el próximo 10 de julio en contra de la sentencia del Estatut.
La incógnita es cuándo se celebrará la comparecencia del presidente catalán ante el Parlament, que es probable que tome forma de pleno extraordinario, tal como pide CiU.
La fecha de ese pleno está pendiente de cuándo se dé a conocer la sentencia del Estatut, ya que hasta ahora sólo se ha divulgado el fallo.
Esta mañana se ha reunido la Junta de Portavoces por este motivo, y ha analizado la posibilidad de celebrar este pleno el 9 de julio, un día antes de la manifestación.
Sin embargo, todo dependerá de cuándo se difunda la sentencia. Si se conoce en días, se fijaría esa fecha; si se demora mucho más allá de una semana, el pleno se celebraría por fuerza después de la manifestación del 10 de julio.
