Esquerra Republicana está dispuesta a competir con una de sus amenazas en las elecciones de otoño: las ofertas independentistas que quieren robarle votos y que pueden agudizar la caída que le pronostican los sondeos.
Esquerra Republicana está dispuesta a competir con una de sus amenazas en las elecciones de otoño: las ofertas independentistas que quieren robarle votos y que pueden agudizar la caída que le pronostican los sondeos.