El PP y sus ataques a las mujeres: vuelta a la falange y al «andar por casa»

Como si el poder les hubiera aturdido, y como si los españoles hubieran pensado que peor que Aznar, en términos de ideología de derecha extrema no estaríamos nunca, va Gallardón y nos sale rana. Si, si, ese que parecía el «más progre» de la casta nos suelta ahora que el aborto no puede contemplar las malformaciones como recurso legal, porque eso es «amoral». Y aunque de amoral le podría dar yo clases magistrales a este señor y a toda su cuadrilla, cuando cobran cuatro veces más el salario mínimo solo en concepto de manutención y se embuchan cargos repetidos para que sus salarios se vayan a la luna, mientras recortan en todos lados, mejor nos quedamos con el tema del que les quería hablar, con el PP y los ataques a las mujeres, y una vuelta a la falange más que escondida.

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PP, elecciones, ciudadanos daneses, Internet

Abortar es un derecho por ley que se reconoce en casi todos los países europeos y democráticos. Sería ilógico obligar a tener a un niño a una mujer que no lo desea. Y es que por naturaleza, los humanos necesitamos muchos años para conseguir valernos por nosotros mismos, y una madre debe al menos dedicar 18 años de su vida a criar al suyo. Y si no lo desea, sea el motivo que sea ¿obligarla por ley no es una especie de condena por un delito cometido? A mi me lo parece en toda regla

Y por muy absurdo que les pueda parecer mi planteamiento, no está lejos del de Gallardón, en el que afirma que no se puede abortar por malformaciones en el feto. Y me parece perfecto que sean pro-vida, y que fomenten la natalidad, pero lo que no se puede es defender los derechos de alguien que no ha nacido en detraimiento de los de una mujer, ciudadana que ha adquirido ya todos los propios.

¿La solución? La primera que dejen de usar la crisis para atacar los derechos de todos los colectivos, en particular de las mujeres. La segunda que entiendan de una vez que la mujer es quien es dueña de su cuerpo, y por tanto si no quiere tener un hijo, valga decir que existen métodos anticonceptivos a por doquier, no lo tiene, con la ley por delante, hecha para protegerla. Y la tercera, que mejor que se traten otros temas que de verdad preocupan a la sociedad en justicia, porque a pocos he visto yo quejándose de la ley del aborto, y a muchos por las preferentes, por los plazos de la justicia, o por los casos de corrupción que parecen nunca querer resolverse.

Y para que le sirva de precedente al señor Gallardón, quién desee abortar, si no puede hacerlo en España, lo hará en Londres. Pero bueno, si a él le parece que volver al franquismo o a las normas de las mujeres de la falange es progreso, ya nos ha dejado claro lo que somos las mujeres para él…