El presidente francés, Nicolas Sarkozy, invitó al presidente palestino, Mahmud Abas; al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y al presidente egipcio, Hosni Mubarak, a París para mantener conversaciones de paz antes de finales de octubre.
Maquinas de construcción comenzaron a retirar tierra en al menos dos asentamientos en la ocupada Cisjordania, pero aún no se prevé un gran desarrollo debido a que esta semana los judíos celebran una fiesta religiosa.
Al permitir el vencimiento de la moratoria de 10 meses en Cisjordania, Netanyahu desafió la petición del presidente de EEUU, Barack Obama, de una extensión y evitó enfrentarse con los partidos de su coalición de Gobierno que están a favor de los asentamientos.
«Israel está dispuesto a mantener contactos en los próximos días para encontrar una forma de continuar las conversaciones con la Autoridad Palestina», dijo Netanyahu en un comunicado emitido minutos después del fin de la moratoria a la medianoche.
Los responsables palestinos aclararon que aún no tomarían una decisión sobre abandonar las negociaciones, al menos hasta que el foro de la Liga Árabe se reúna el 4 de octubre.
«En relación con la posición palestina, se decidirá después de volver al comité de seguimiento árabe y el ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP)», dijo Yaser Abed Rabo, un negociador palestino.
El alto cargo se refería a los dos organismos que dieron a Abas el visto bueno para que reanude las negociaciones directas con Israel tras una interrupción de 20 meses. El objetivo de Washington es resolver en el lapso de un año el proceso para lograr la creación de un Estado palestino.
De visita en París, Abas expresó su frustración pero no hizo ninguna amenaza directa respecto a abandonar las conversaciones, al decir a periodistas que «si Israel elige la paz, continuaremos negociando. Si Israel no lo hace, serán una pérdida de tiempo».
Netanyahu, que impuso la moratoria sobre los asentamientos en Cisjordania en noviembre, bajo presión de Obama, instó a los colonos a ejercer la moderación tras el vencimiento de la medida.
Sin embargo, grupos de colonos anunciaron que comenzarán las construcciones en alrededor de 2.000 casas la próxima semana, cuando finalice el festividad religiosa de Sucot.
Los palestinos dicen que los asentamientos les impedirán crear un Estado viable e independiente y el tema es uno de los más complejos que deben resolver las partes para alcanzar un acuerdo de paz.
Más de 430.000 judíos viven en más de 100 asentamientos establecidos en Cisjordania y el este de Jerusalén, sobre territorios que Israel capturó de Jordania en la guerra de 1967.