Las declaraciones de Durán i Lleida que ya les habíamos contado no parecen haber caído demasiado bien en tierras andaluzas. Y la polémica se extiende por toda España porque el señor catalán se permite el lujo de vivir en el Hotel Palace, ahí es nada. Y eso que estamos en crisis. ¿Si no fuese así dónde viviría?
Lo mejor del asunto es que a Durán no le nace ningún sentido de culpa, y aún se atreve a decir que él «paga menos en el Palace de lo que muchos por un apartamento en Madrid». ¿De qué apartamento hablamos, de los de los ricos de más de 200 metros cuadrados? Porque o el Palace ha bajado mucho sus precios desde la crisis, o si no a mi como española no me cuadran las cuentas.
Una vez más nos queda demostrado quienes sufrimos y pagamos al mismo tiempo la crisis, mientras que los políticos se lo pasan a la grande con nuestros impuestos. Sin duda con tantos parados y un país cayendo en picado, deberían avergonzarse. Pero la vergüenza es una cualidad a perder antes de entrar en la carrera política. o eso parece.
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