Por otro lado, Chávez volvió a repetir que acogía con agrado la marcha del ex presidente Alvaro Uribe y le culpó de nuevo de haber propiciado esta ruptura diplomática entre las dos naciones. El mandatario venezolano también advirtió a Santos de que si seguía la línea de su predecesor, acusando a Venezuela de albergar a «terroristas», los esfuerzos de reconciliación fracasarían de inmediato.