El resultado del sondeo, el último antes de las votaciones, confirmó que la actual campaña es una de las más disputadas en la historia reciente del país y que ninguno de los candidatos obtendría la mayoría absoluta en la primera vuelta, por lo que deberá realizarse una segunda, el 20 de junio.
En la encuesta, Santos, ex ministro de Defensa del presidente Álvaro Uribe, logró un 34 por ciento de la intención de voto; mientras que Mockus, ex alcalde de Bogotá y matemático de origen lituano, alcanzó un 32 por ciento.
El margen de error de la encuesta, que incluyó 1.856 entrevistas, es de un 2,8 por ciento, por lo que técnicamente se trata de un empate para la primera vuelta que se celebrará el 30 de mayo.
En una segunda vuelta, si ninguno logra la mayoría de votos en la primera votación, Mockus vencería a Santos con un 45 por ciento de las preferencias, contra un 40 por ciento del candidato del Gobierno, reveló el sondeo.
En segunda vuelta, como lo pronostican las encuestas, serán decisivas las alianzas con los candidatos y partidos políticos que sean derrotados en la primera.
El duelo Santos-Mockus sólo es comparable con los que en 1994 sostuvieron el liberal Ernesto Samper y el conservador Andrés Pastrana y, cuatro años después, Pastrana y el candidato del Partido Liberal Horacio Serpa.
La actual carrera por la presidencia se diferencia de las victorias que logró Uribe en las elecciones de 2002 y 2006, cuando ganó cómodamente en primera vuelta.
El candidato oficialista bajó frente al sondeo del 9 de mayo cuando registró un 35 por ciento, mientras que Mockus cedió 2 puntos desde el 34 por ciento de la encuesta anterior.
En el tercer lugar de la intención de voto para la primera vuelta se ubicaron el candidato del izquierdista Polo Democrático Alternativo, Gustavo Petro, y la candidata del Partido Conservador, Noemí Sanín, con un 6 por ciento.
El candidato de Cambio Radical, Germán Vargas Lleras, registró un 5 por ciento de intención de voto y el liberal Rafael Pardo un 3 por ciento.
ESTILOS DIFERENTES
Mockus, conocido en Colombia por haber sido alcalde de Bogotá en dos oportunidades y por excentricidades como mostrar el trasero a un grupo de estudiantes cuando era rector de la Universidad Nacional y por casarse en un circo, ha ganado espacio entre los electores por representar un cambio y un voto de protesta contra la política tradicional, según analistas.
El cansancio de los electores por denuncias de corrupción, violaciones a los derechos humanos e interceptaciones telefónicas ilegales en el Gobierno de Uribe, sumado a los nexos de congresistas con paramilitares de ultraderecha, alimentan el apoyo al candidato del Partido Verde, de acuerdo con los expertos.
Mockus tiene un programa de Gobierno similar al de Santos y otros candidatos, pero su discurso de legalidad, honestidad, transparencia y decencia ha sido bien acogido por los votantes, según los analistas políticos.
Santos ha sido perjudicado por los escándalos del actual Gobierno, aunque esos problemas no golpearon la popularidad de Uribe, que se ubicó en un 68 por ciento.