«Cada vez es más normal que todo sea muy raro, y ese es nuestro problema», me dice Juan Urbano mientras bebe su segundo café del día y señala con un dedo pesimista la página del periódico en la que se dice que el PSOE estudia un camino jurídico, que se adivina largo y lleno de curvas, para obligar al Gobierno de Esperanza Aguirre a que les deje mirarle el sótano a las cuentas del ex consejero Alberto López Viejo, …