La banda terrorista ha anunciado, una vez más, su alto el fuego condicionado ante un medio de comunicación extranjero como la BBC. Las claves que han podido influir para tomar esta decisión no escapan de la lógica: mostrar su victimismo, unido a que el Gobierno y las fuerzas de seguridad han hecho una labor extraordinaria, debilitando cada vez más a esta banda de cobardes encapuchados.