El hundimiento del PSOE

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Ayer se conocían las estadísticas de estimación de voto publicadas por el CIS. Los resultados eran claros. No había interpretaciones que valiesen. El PP aventaja al PSOE en 7.9 puntos récord desde que gobierna Zapatero.

Pero como de cifras ya hablamos ayer, hoy queremos hablar de la interpretación que se hace de estas cifras, y de su publicación en este momento, un momento clave. Aunque las cifras sean claras, nuestros políticos siempre saben como darle la vuelta a la tortilla, y desde el PSOE ya se han echo eco de su defensa ante el hundimiento del PSOE, el hundimiento del gran barco comandado por Zapatero, que iba a la deriva antes del cambio de ejecutivo. Porque ese cambio fue el principio de una nueva campaña. Una nueva campaña planteada desde un punto de vista de comunicación con el ciudadano que pretende salvar al partido del hundimiento trágico.

El hundimiento del PSOE

Pues bien, las primeras reacciones ante los resultados vienen de la mano de Rubalcaba, y es que los sondeos coincidieron con la tan polémica y poco productiva huelga, momento que para Rubalcaba «marca el peor momento desde la perspectiva del Gobierno«. Por tanto, no es que el PSOE vaya de mal en peor, ni que el hundimiento del barco socialista sea palpable, en política hay una segunda lectura; la de los malos momentos en que se hacen los sondeos.

Y aunque Rubalcaba haya usado una estrategia política archiconocida de no afrontar los hechos y desviarse. Lo cierto es que en parte se acopla con su nueva estrategia, esa que marca el final de una etapa y el inicio de otra. Una etapa que finalizó cuando se nombró el nuevo ejecutivo, cuando se asumieron nuevas políticas de comunicación y cuando la estrategia del PSOE paso a ser llegar al ciudadano.

Así, la etapa anterior estuvo caracterizada por la negación de una crisis inminente que nos llevo a estar como estamos, con las cifras más altas de paro de toda la Eurozona. Luego hubo una fase de tránsito, esa que llevo a Zapatero a enfrentarse a su electorado (de esta etapa es la encuesta del CIS), para tomar medidas caracterizadas de la derecha para poner a España en la dirección correcta. Una vez hecho lo qeu había que hacer, Zapatero colocó a los que serían las caras del cambio de gobierno, un gobierno que pretende (o eso dicen) no decir más mentiras, y aprovechar que los rostros de ahora no son los que se han quemado por las reformas impuestas en la etapa de transición, para plantearse como una nueva alternativa política, un nuevo PSOE que poco tiene que ver ocn el que era.

Una alternativa que bajo mi punto de vista dará el gran salto cuando se empiezen a ver los resultados económicos, que por ahora está trabajando en acercarse al ciudadano. Una comunicación limpia, cero insultos y una nueva página web diferente a lo visto, parecen ser el primer impulso de la nueva política del PSOE. Ahora sólo queda ver que pasa en los próximos sondeos, que si todo sigue como está, sin duda darán algún voto más al PSOE, a menos que el PP trabaje duro en establecer lo que vende, porque por ahora lo único que yo he captado es que simplemente plantean que el PSOE lo ha hecho mal. Y en eso estamos de acuerdo, pero para dar el voto, se necesita algo más.