– Salgado anuncia una ronda de contactos con los partidos para la convalidación del decreto
MADRID, 20 (SERVIMEDIA)
El Gobierno aprobó hoy el decreto que recorta el gasto público para 2010 y 2011 negando contradicciones internas sobre una posible subida de impuestos y proclamándose “fiel” al proyecto de avances sociales con el que ganó los comicios en 2004 y 2008.
Las dos vicepresidentas, María Teresa Fernández de la Vega y Elena Salgado, comparecieron en rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros en el que se aprobó el decreto que reduce las retribuciones de los empleados públicos este año y los congela, junto a las pensiones que no son mínimas ni contributivas, en 2011.
“No ha sido una decisión fácil de tomar para el Gobierno”, aseguró Fernández de la Vega, consciente también de que las medidas no son tampoco “fáciles de aceptar” para los ciudadanos, pese a lo cual confía “en la comprensión de todos” porque son “imprescindibles” para acelerar la reducción del déficit.
El proyecto del Gobierno, aseguró, sigue siendo “avanzar en el Estado del bienestar y en ganar progreso para todos”, y por ello, añadió, los socialistas siguen “fieles” a una filosofía que implica la progresividad de todo esfuerzo económico y fiscal.
Esa progresividad es la que lleva también, apuntaron las dos vicepresidentas, a avanzar que cualquier aumento de impuestos que se pueda aprobar próximamente se hará sobre “quienes más tienen”, como anunció el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
Salgado precisó la diferencia entre “renta alta” y “patrimonio importante”, dejando ver con ello que esa subida de impuestos no recaería necesariamente en el IRPF, y reiteró la tesis apuntada por el presidente de que se concretará en el momento que se considere “oportuno” en el programa de reducción del déficit.
Por el momento, explicó, se ha optado por reducir el déficit por la vía del gasto, “ya hablaremos de los ingresos” cuando se juzgue oportuno, insistió. No hay fecha, reconoció Salgado, pero la expresión “inminente” no ha sido utilizada en ningún momento por el presidente del Gobierno.
Salgado se mostró dispuesta a explicar a los dirigentes socialistas los motivos por los que el Gobierno no tiene aún sobre la mesa esa subida de impuestos que se reclama desde el PSOE, pero tanto ella como Fernández de la Vega negaron que haya contradicciones sobre ese asunto.
Es posible que los ministros se hayan expresado “con una palabra u otra”, decía Fernández de la Vega, pero todos lo han hecho “con la misma filosofía” y por ello en el fondo “todos hemos dicho lo mismo”, que a la hora de reclamar un esfuerzo a los ciudadanos, la mayor contribución tiene que ser de quienes tienen “más capacidad”.
La congelación del sueldo de los funcionarios y de las pensiones está en el mismo decreto, y el Gobierno reiteró por boca de Fernández de la Vega su “plena confianza” en que sea convalidado por el Congreso de los Diputados, para lo cual basta mayoría simple, es decir, más votos a favor que en contra.
A pesar de las “diferencias legítimas que nos separan”, aseguró la vicepresidenta, el Gobierno confía en el sentido de la responsabilidad de las fuerzas parlamentarias y en la convicción de que las medidas son “imprescindibles” para consolidar la reducción del déficit.
En todo caso, Salgado anunció una ronda de conversaciones con todos los grupos, en la que incluirá al PP y en la que hará “el máximo esfuerzo” para sumar a ese partido al esfuerzo colectivo que se está reclamando.
(SERVIMEDIA)
20-MAY-10
CLC/lmb