El servicio se desarrolló con normalidad, al cien por cien. Ayer en los andenes del metro parecía un sábado normal. Sólo parecía porque es posible que mañana los empleados vuelvan a la huelga. A unos paros salvajes como los que que han dejado a los madrileños tirados toda la semana. Habrá que esperar a la votación en asamblea de trabajadores.