Ayer Ecuador era todo un polvorín. Sobre todo el distrito de Quito. Todo empezó cuando la policía se sublevó a causa de una ley que consideraban injusta y que atacaba sus propios intereses. La sublevación permitió que los policías retuvieran a Rafael Correa, presidente de Ecuador en un hospital en el cuál se le estaba operando en el distrito central. 11 horas duró su «secuestro». Después, el ejército, fiel al presidente oficialista, Rafael Correa, consiguió liberarlo.
Esa es la crónica resumen de lo que ha ocurrido. Pero la cuestión es preguntarse el porque. ¿Por qué la policía se subleva y planea un golpe de Estado, por la aprobación de una ley? ¿Qué le ocurre a Latinoamérica para que episodios de este tipo se sucedan?
Quizás una historia de corrupción sin límites. Quizás una criminalidad que no cesa y hace que salir cada día a la calle sea toda una odisea. Quizás son presidentes que prometen revoluciones, y luego lo único que cumplen es enriquecerse a costa del país, mientras el pueblo se muere de hambre… ¿Qué opinan ustedes?
Fuente | El país
